Comida salvadoreña, un viaje gastronómico de sabores ancestrales
Por Paula Velásquez
Matices únicos y sabores ricos, esta es una excelente descripción de la comida salvadoreña. La gastronomía de El Salvador tiene grandes influencias indígenas y extranjeras, contando así con aportes españoles e italianos. Por ello el uso de ingredientes como el maíz o los frijoles son predominantes, así como el uso de arroz, cerdo, pollo, res y mariscos.
Sumado a esto, su gran variedad de productos locales gracias a su tierra fértil, convierten a sus comidas en platillos coloridos y de gran sabor.
Hay mucho por explorar sobre la comida salvadoreña, así que, estos son algunos de sus representativos. ¡Comencemos!
Pupusas
Si nos preguntamos por el plato más popular de El Salvador, las pupusas son la respuesta inminente. Este gran favorito consiste en una tortilla con base de masa de maíz o arroz, la cual está rellena de frijol, queso, chicharrón o ayote. Aun así, las pupusas pueden variar en los ingredientes de preferencia del comensal, por ejemplo, se le puede agregar pollo o mariscos, también diversas hierbas comestibles.
Curiosamente, “Pupusa” proviene de las palabras náhuatl popotl y tlaxkalli, cuyo significado es grande y tortilla de maíz. Las pupusas tienen forma circular y son cocinadas en una plancha de cocción de barro que se llama comal.
A pesar de que pueden ser comidas durante todo el día, los salvadoreños las prefieren para el desayuno o cena, siendo acompañadas de horchata, una bebida dulce y cremosa, o un simple café.
Tamales salvadoreños
Los tamales son un representativo por excelencia de México y muchos países centroamericanos. Haciendo honor a esto, El Salvador nos ofrece varios tipos en su cocina. Los tamales salvadoreños están preparados con maíz y varias especias rellenas de cerdo, gallina o pato y salsa de tomate natural, aunque una vez más, la variedad de ingredientes es grande.
Una vez preparada su masa, son envueltos en hojas de plátanos y cocinados en agua hirviendo. Para quienes disfruten de los tamales, la buena noticia es que en esta gastronomía son populares varios tipos de sus preparaciones, siendo considerados como clásicos los siguientes:
- Tamales pisques: Están hechos con masa de maíz y rellenos con frijoles y queso nada más. No tienen carne en su preparación.
- Tamales de chipilín: A su masa de maíz se le agrega chipilín, una planta típica con sabor muy distintivo. Al momento de ser servidos, lo son con una salsa de tomate con un toque picante.
- Tamales de elote: Otro buen ejemplo es el tamal de elote, hecho con granos de maíz tiernos y añadiendo a su mezcla crema de leche, manteca, leche y azúcar. Su toque final es que están envueltos en hojas de mazorcas.
Pasteles
Los pasteles salvadoreños son pasabocas similares a las empanadas del resto de Latinoamérica. Hablamos de una masa hecha de maíz rellena con carne, pollo y verduras que luego es freída en abundante aceite.
El distintivo de su masa es que está condimentada con una pizca de sal, consomé de pollo, y achiote, que es un condimento local y de las zonas andinas cálidas. Mientras que las verduras usadas para su relleno son por lo general, papa, zanahoria y güisquil que sería un fruto de planta mesoamericana.
El sabor sigue abundando en su relleno por la forma en la que las carnes son condimentadas con ajos, pimiento y chiles verdes. Es un platillo excelente para quienes quieran algo económico y sabroso que comer en un viaje al país.
Yuca frita
La yuca es uno de los tubérculos de más importancia en la comida salvadoreña, y la popularidad de la yuca frita es una muestra de ello. La forma de prepararla en esta gastronomía es cocinando a la yuca envuelta en una hoja de huerta, después friéndola y acompañándola de salsas, asimismo de platillos con carne. Es decir, es un acompañante más que un platillo principal por sí solo.
La yuca frita bien puede ser el acompañante perfecto de chicharrones o pepescas, que son pescados de tamaño pequeño de la zona. También son típicas del almuerzo.
Sopas salvadoreñas
Hay muchas sopas interesantes a degustar en la comida salvadoreña. Estas son algunas de las más famosas y destacadas por su delicioso sabor:
- Sopa de mondongo: Esta sopa está hecha con una mezcla de patas de vaca, callos y tendones como ingrediente principal. Pero sus especias, maíz, yuca, col y zanahoria son los que complementan sus sabores. Es realmente una de las sopas más populares del país, es vendida en mercados locales y una cura recetada para la resaca.
- Sopa de pata: Es similar a la sopa de mondongo, pero con la diferencia de que solo incluye como ingrediente principal a la patas de la vaca, no sus tendones o callos.
- Sopa de gallina india: Otra sopa de gran popularidad es la sopa de gallina india, la cual está hecha con un pollo “salvaje” o “indígena”, que es mezclado con patatas, arroz y verduras, como el brócoli, coliflor y zanahorias.
- Gallo en chicha: El gallo en chicha o mejor conocida como sopa de gallo, es una rica sopa hecha con gallo y chicha. La chicha es una bebida fermentada derivada del maíz en este caso. Por igual, se usa en su preparación vino blanco, vinagre de piña y ciruelas pasas. Su sabor es único.
Mojarra frita
La mojarra es un tipo de pescado que es fácil de encontrar con abundancia en las regiones tropicales, de allí que, en El Salvador, su preparación se haya vuelto tan típica. La forma de prepararlo es limpiarlo de escamas y agallas, luego salpimentarlo.
Después se fríe en aceite caliente hasta lograr que su exterior quede bien crujiente, y su interior muy jugoso. Suele ser servido con arroz y una ensalada de lechuga, tomate, pepino y limón.
Churrasco salvadoreño
Un plato fuerte con carne de res como estrella principal en la comida salvadoreña es su churrasco típico. Este consiste en carne a la parrilla que es servida en compañía de plátano y frijoles fritos.
La carne primero es marinada en zumo de naranja, aceite y varios condimentos. A continuación, es asada a la parrilla sobre fuego abierto hasta lograr su suavidad y la concentración de sus sabores. Si bien es acompañada de frijoles y plátano frito, lo es también de verduras asadas y queso fresco.
El chirimol es otro acompañante tradicional. Este no es más que una guarnición de verduras ácidas, que es elaborada con tomates en dados, cebollas y cilantro.
Enchiladas
No se puede dejar de mencionar a las enchiladas salvadoreñas, estas son tortillas de maíz doradas, que se caracterizan por ser delgadas y fritas. Son acompañadas de pollo o carne fritos con cebollas, pimientos, tomates y ajos.
En primer lugar, se prepara la carne o el pollo sofriendo con las especies de preferencia, luego se preparan las tortillas que una vez fritas, también podrían ser acompañadas con queso rallado, huevo duro, aguacates o frijoles refritos.
Elotes locos
Un platillo que se repite con constancia en las fiestas nacionales y en la época de cosecha de maíz son los elotes locos. Estos bocadillos están hechos con el elote completo al ser cocinado en su tronco, para esto no se sacan sus dientes.
El sabor es intensificado agregándole queso, salsa negra, mostaza, salsa de tomate y mayonesa. De aquí es de dónde proviene su nombre precisamente, de la combinación caótica de sus salsas y lo vistoso del plato.
Canoas de plátano
Llegando al lado dulce de la comida salvadoreña, es necesario mencionar un postre clásico de esta parte del mundo, esas son las canoas de plátano. Estas consisten en plátanos maduros enteros que son cocinados y rellenados con una mezcla láctea con toques de canela y pasas. Su nombre se debe al tipo de corte en el que se deposita su relleno, el plátano queda como una canoa.
Para su preparación, los plátanos son pelados y freídos con aceite caliente. Después sigue su relleno con leche poleada, que es una combinación de leche condensada, leche entera, huevo y maicena. Con el relleno listo, es que se completará con canelas y pasas.
Atol de elote
Un trago muy consumido en fiestas nacionales y días de frío, es el atol de elote. Esta bebida se sirve caliente y es hecha con maíz fresco mezclado con azúcar, leche, canela y sal. Dando como resultado, una consistencia espesa.
No obstante, el atol de elote no es único atol popular de El Salvador. Los atoles son bebidas ancestrales procedentes de los mayas y con cientos de años de pasado. Por lo tanto, existen más atoles de los que hablar, como el atol de semilla de marañón, hecho a base de semilla de marañón; y atol de piña, hecho en base a esta fruta.
En pocas palabras, la comida salvadoreña está repleta de tradición e historia, y ello es simple de notar en sus platos y la belleza de su cultura gastronómica.